Ha llegado la hora

Después de la remontada histórica del CD Tenerife el pasado sábado ante el Alcorcón, el equipo tinerfeño tiene la obligación de volver a demostrar que no fue una casualidad lo del 3-2, que ha llegado la hora de afrontar la realidad para iniciar el ascenso en la clasificación de la liga 123, que es el momento para volver a ilusionar a una afición que, engañada y puteada por una mala gestión de un pésimo y funesto secretario técnico, en palabras de un celebre tertuliano deportivo, “un rebenque”, y por la menos mala de todo un presidente del consejo de administración de la sociedad anónima deportiva, necesita de los triunfos para, olvidando filias y fobias, volver al estadio Heliodoro Rodriguez López, el próximo 11 de noviembre, para aplaudir a rabiar y confirmar contra el Albacete que no somos unos corderos, que siempre hemos sido lobos disfrazados de mansos corderos.

El representativo insular está con la moral bien alta, el propio entrenador, José Luis Oltra, ha manifestado el grado de moral y buen juego que desplegaron los jugadores no solo en la segunda parte del partido ante el matón alcorconero, además en los entrenamientos durante la semana.

Por otro lado siguen lesionados Aitor Sanz y Paco Montañéz y apercibimiento de suspensión por 4 tarjetas amarillas Alberto Jiménez y Bryan Acosta.

No será extraño que se repita la alineación que jugó contra el Alcorcón, incorporando a Malbasic y a Naranjo por Nano y Joao y con un 5-3-2.

Que nadie de la victoria por hecha, el Numancia será la revalida de los tinerfeños para saber si la ciada remontada fue solo un espejismo, o bien fue, como dijimos en nuestro anterior comentario, un punto de inflexión, un antes y un después.

Joaquín Hernández, periodista