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José Mourinho, extrentrenador del Real Madrid, ha sido llamado a declarar como imputado el próximo 3 de noviembre en el Juzgado de Instrucción número 4 de Pozuelo de Alarcón (Madrid).
Su citación se debe a una acusación por defraudar 3,3 millones de euros procedentes de sus derechos de imagen y le imputan una presunta comisión de dos delitos contra la Hacienda Pública. Según ABC, la Fiscalía asegura que el luso habría cometido dos delitos contra la Hacienda Pública en relación con el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) en los ejercicios 2011 y 2012, justamente cuando entrenaba al Real Madrid.
La cantidad defraudada asciende a 3.304.670 euros (1.611.537 euros en 2011 y 1.693.133 euros en 2012).
En total, más de 3 millones de euros que se ocultaron, según la Sección de Delitos Económicos de la Fiscalía Provincial de Madrid, a Hacienda.
Según la denuncia interpuesta en los juzgados de Pozuelo de Alarcón, José Mourinho firmó un contrato en el que cedía sus derechos de imagen a una sociedad con sede en las Islas Vírgenes británicas, un paraíso fiscal.
Si esta denuncia logra prosperar, será un auténtico varapalo para el Real Madrid y para el presidente de la entidad blanca.