LIBREDIARIO@DIGITAL / LAS PALMAS DE GRAN CANARIA
El Obispo de Canarias, Francisco Cases, ha lamentado "la frivolidad blasfema" de la Gala Drag Queen del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria celebrada anoche, y se ha preguntado si no hay límites a la libertad de expresión con manifestaciones que ofenden a muchas personas.
"Ha triunfado la frivolidad blasfema en la gala Drag del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria. Triunfado en los votos y triunfado en los aplausos de una muchedumbre enardecida", indica Cases en un comunicado, tras el espectáculo con alusiones a la Virgen y a la crucifixión de Cristo.
El obispo expresa su enorme tristeza -"estoy viviendo ahora el día más triste de mi estancia en Canarias"- tras ver a "miles de personas que coreaban, aplaudían y votaban con los teléfonos" al ganador.
Un espectáculo que le ha hecho recordar, por contraste, a los miles de ciudadanos que acompañaron a la Virgen del Pino en una bajada de su santuario y traslado a la capital grancanaria hace unos años, así como las procesiones del Santo Cristo de Telde, de la Virgen del Carmen, de la Virgen de la Luz de la Isleta o de la Virgen de los Dolores de Schaman.
"Se me han llenado los ojos de lágrimas", confiesa el obispo, quien se pregunta "si no hay límites para la libertad de expresión, si todo vale en las manifestaciones festivas porque nada es verdad, si no hay recursos para cortar la frivolidad blasfema que ofende a muchos ciudadanos. Tenemos mucho que pensar".
El obispo celebrará eucaristía en la catedral de Las Palmas de Gran Canaria el 3 de marzo con la intención de "pedir perdón porque el testimonio de nuestras vidas creyentes no es lo suficientemente vigoroso y coherente en la convivencia social".