LIBREDIARIO@DIGITAL / SANTA CRUZ DE TENERIFE
"En el Cabildo tenemos las competencias que tenemos, y en derechos humanos no tenemos competencias”. Este fue uno de los argumentos usados hoy por la consejera de Acción Exterior del Cabildo de Tenerife, Delia Herrera, para justificar el rechazo del grupo de Gobierno de CC-PSOE y del grupo del PP a la moción presentada por el grupo insular de Podemos a la comisión plenaria de Empleo y Acción Exterior.
Una iniciativa que pedía, como explica el consejero de Podemos Roberto Gil-Hernández, que el apoyo de esta administración a la internacionalización de las empresas tinerfeñas asumiera la solidaridad como eje transversal, garantizando el respeto a los Derechos Humanos, la justicia, la cooperación en paz y el desarrollo sostenible.
Gil-Hernández apunta que la moción que defendió este viernes en comisión plenaria planteaba la creación de un Consejo Insular de Buenas Prácticas en la Acción Exterior del Cabildo de Tenerife, así como la redacción de su reglamento de aplicación. En este consejo, añade, deberían estar representados expertos en relaciones internacionales, asociaciones empresariales, sindicales y organizaciones no gubernamentales especializadas en materia de cooperación, explica el representante de Podemos. Y detalla que su función sería dar cuenta de las intervenciones realizadas en este ámbito por parte del Cabildo, además de analizar las repercusiones de dicha interacción y sus efectos para la Isla.
Destaca que, a su vez, este consejo insular de buenas prácticas podría ser muy útil como comité asesor para aquellos casos en los que la institución insular precise de apoyos a la hora de trabar alianzas con otras entidades de rango similar en el contexto internacional, o incluso posicionarse de cara a cualquier eventualidad o conflicto que pudiera surgir lejos del Archipiélago, y apoyar medidas orientadas a su resolución.
En definitiva, apunta Gil-Hernández, “proponíamos sentar las bases para que el Cabildo asuma la responsabilidad que le toca sobre el escenario tricontinental en el que estamos insertos, y actuar en consecuencia desde nuestra escala insular para que el desarrollo de Canarias y sus diferentes sectores socioeconómicos redunde también en el desarrollo de los países que nos rodean”.
Para reafirmarse en su rechazo a la moción de Podemos, la responsable del área de Acción Exterior se ha limitado a asegurar que el Gobierno insular “no se plantea quién gobierna ni cómo se gobierna en los países con los que la institución insular tiene suscrito acuerdos”. Una afirmación “que ha quedado claramente demostrada” según el consejero de Podemos “tras escucharla decir barbaridades como que no compete al Cabildo velar por los Derechos Humanos”.