siguenos en facebook siguenos en Twitter siguenos en Google+ Canal de youtube

Crece el rechazo en Tenerife a la construcción del Circuito del Motor

|

7c937c79 323f 4eb2 a7e2 9f4cd2b8577a 16 9 discover aspect ratio default 0


GRANADILLA DE ABONA/ Tenerife se encuentra actualmente en el epicentro de un debate candente que enfrenta un supuesto interés económico con la conservación del medio ambiente. En el centro de la controversia se encuentra el proyecto del Circuito del Motor, una propuesta que ha generado un intenso rechazo por parte de diversos sectores de la población.


Este proyecto, concebido como un circuito de carreras de alta velocidad, pretende ocupar una porción significativa del territorio de Tenerife, lo que ha desatado la preocupación de colectivos ecologistas y de la población en general. Argumentan que la construcción del circuito supondría un grave daño al ecosistema local, así como una amenaza para la biodiversidad única que alberga la isla.


Especies naturales endémicas y amenazadas, como el lagarto gigante de Tenerife (Gallotia intermedia) y el pinzón azul (Fringilla teydea), se encuentran en peligro debido a la pérdida de hábitat que ocasionaría la construcción del circuito. Estas especies, ya de por sí vulnerables, podrían enfrentar una presión adicional que podría llevarlas al borde de la extinción.


Además de los impactos ambientales, diversos economistas han expresado su escepticismo sobre la viabilidad económica del proyecto. Según ellos, la inversión necesaria para la construcción y mantenimiento del circuito no se traduciría en beneficios económicos significativos para la isla. Señalan que Tenerife ya cuenta con una sólida industria turística, basada en sus recursos naturales y su clima atractivo, y que desviar recursos hacia un proyecto de dudosa rentabilidad podría tener consecuencias negativas para la economía local a largo plazo.


"El desarrollo sostenible es fundamental para el futuro de Tenerife", afirma María López, ecologista local. "No podemos sacrificar nuestro entorno natural único en aras de proyectos que benefician a unos pocos mientras perjudican a muchos".


Por otro lado, partidarios del proyecto argumentan que el Circuito del Motor podría impulsar el turismo deportivo y generar empleo en la isla. Sin embargo, estas opiniones no han logrado aplacar las preocupaciones de aquellos que ven en la conservación ambiental una prioridad irrenunciable.


En medio de este debate, las autoridades locales se enfrentan a un dilema: ¿priorizar el desarrollismo económico cortoplacista o salvaguardar la biodiversidad y el patrimonio natural de la isla para las generaciones futuras? La decisión que se tome tendrá repercusiones de largo alcance, no solo para Tenerife, sino también para el equilibrio entre el desarrollo humano y la conservación del medio ambiente en todo el mundo.

Libre@Diario