La falta de entendimiento con el PSOE ha llevado a Podemos a renunciar a llevar la iniciativa en busca de una alternativa de Gobierno al PP y a centrarse en su organización interna y su papel de oposición en el Congreso, donde ya se ven cómodos frente a un Ejecutivo de Mariano Rajoy.
Tras dos años de ritmo frenético, en el que las sucesivas elecciones no les han dejado tiempo para respirar, el partido de Pablo Iglesias cree que ahora toca bajar "el pistón" y no es esperable que el líder de Podemos sorprenda con alguna maniobra cuando el jueves acuda a la ronda de consultas políticas con el Rey Felipe VI, según fuentes de la formación morada.