/ LAS PALMAS DE GRAN CANARIA
El programa ‘Parques Activos’ que promueve la práctica de actividad física supervisada y segura en cinco parques de la ciudad, ha logrado en sus primeros 15 días de actividad que un buen número de personas, más de 400 hasta el momento, se sumen a esta iniciativa impulsada por el Instituto Municipal de Deportes (IMD) de Las Palmas de Gran Canaria, de manera conjunta con el Colegio Oficial de Profesionales de Educación Física y Deporte de Canarias, y que facilita que un equipo de educadores físicos asesoren a los usuarios con el fin de que desarrollen una actividad adecuada a sus condiciones y a sus necesidades.
El programa, que presentó hace 15 días el concejal de Nuevas Tecnologías y Deportes, Aridany Romero, se desarrolla de lunes a sábado, en horario de mañana y tarde, en el parque Juan Pablo II de Ciudad Alta, el parque Romano del Distrito Centro, el parque de La Mayordomía, del Distrito Tamaraceite-San Lorenzo-Tenoya, el parque de la Cícer, del Distrito Isleta-Guanarteme-Puerto, y el parque de San Cristóbal, del Distrito Vegueta-Cono Sur-Tafira.
Una vez transcurridas las dos primeras semanas desde su puesta en marcha, ya se ha llegado a los 400 beneficiarios del programa, de los que un 60% son hombres y el 40% mujeres. Se ha podido contrastar que, aproximadamente, el 70% de las personas que han recibido asesoramiento son de condición física baja. Por edades, el grupo más numeroso corresponde al de deportistas entre los 56 y 70 años.
El asesoramiento más requerido ha sido el relativo al correcto uso de los aparatos biosaludables, seguido de cerca por la actividad física en general. Temas como la vestimenta, calzado deportivo, hidratación y dietas se han planteado, igualmente, por parte de los primeros cuatrocientos usuarios.
De momento, el IMD tiene previsto el desarrollo del programa durante los seis próximos meses, aunque no se descarta que el plazo se incremente si se mantiene el interés apreciado en estos primeros días por parte de los usuarios, a los que profesionales orientan para evitar, en muchos casos, el abandono de la práctica deportiva por no ver resultados o sentir molestias por una inadecuada ejecución del ejercicio.