MADRID (Reuters) - La Mesa del Parlamento de Cataluña ha aprobado presentar una querella por prevaricación contra el juez del Tribunal Supremo que impidió la excarcelación del candidato independentista Jordi Sànchez para acudir a su investidura, prevista para el viernes y finalmente aplazada sin fecha, anunció el Parlament.
Alegando que se habían vulnerado los derechos políticos de Sànchez -acusado de rebelión-, el presidente del Parlament, el también independentista Roger Torrent, ha encargado a los servicios jurídicos una querella a la que son contrarios los partidos constitucionalistas de la fragmentada cámara.
El juez del Supremo Pablo Llarena alegó el jueves riesgo de reiteración delictiva al denegar por segunda vez a Sànchez la salida de la prisión de Soto del Real para acudir a una nueva investidura en la que aspiraba a ser designado presidente de Cataluña.
Llarena desestimó las argumentaciones de Sànchez de que el Comité de Derechos Humanos de la ONU había pedido a España que se respetasen sus derechos políticos, afirmando que estos sólo se habían conculcado parcialmente puesto que se le había permitido acudir a unas elecciones y delegar su voto.
El juez consideró que si el número dos de JXC era elegido presidente de la Generalitat podría volver a instigar acciones como el referéndum o la declaración unilateral de independencia como la que se llevó a cabo en octubre pasado en Cataluña.
La decisión judicial prolonga el impasse político en la región casi cuatro meses después de las elecciones regionales y mantiene activa la cuenta atrás para volver a acudir a las urnas en caso de que no haya un presidente elegido antes de finales de mayo.